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Presentación
El Observatorio de Desalojos, proyecto coordinado por LabCidade (FAU-USP) en colaboración con LabJuta (UFABC) y el Grupo de Investigación Transborda (UNIFESP), mapea y difunde información sobre desalojos y amenazas de desalojo en la Región Metropolitana de São Paulo (RMSP), desde 2012.
El mapeo se divide en dos frentes principales, con tres resultados:
Como cualquier método, el Mapeo Colaborativo de Desalojos tiene algunas limitaciones que deben tenerse en cuenta. Los análisis cualitativos aquí reportados se obtuvieron de múltiples métodos y fuentes de datos. Esta encuesta carece de una cobertura completa: el resultado no contiene ni pretende contener todo el universo de procesos de desalojos en la RMSP. Como consecuencia, los datos registrados no proporcionan la escala absoluta de los desalojos, ni pueden usarse para verificar su intensificación o relajación, ya que las limitaciones de alcance de las propias herramientas de registro del proceso pueden interferir con la lectura.
A partir de esto, el Observatorio de Desalojos tiene como objetivo: a) identificar y comprender, a diferentes escalas, los impactos causados por los desalojos y las amenazas; y (b) sistematizar y compartir información para fortalecer la resistencia de los afectados frente a políticas y proyectos urbanos que implican procesos de desalojo y violación de derechos.
Linea del tiempo
Los resultados del mapeo colectivo se compilaron hasta junio de 2023 y la análisis cuantitativa se compiló hasta enero de 2024.
La serie histórica del Mapeo Colaborativo de Desalojos también refuerza la tesis de que existe una dinámica sistemática de desalojos en la RMSP que mantiene a miles de familias en una constante situación de inseguridad habitacional.
La pandemia de COVID-19, decretada en marzo de 2020 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), es una marca histórica reciente en el mapeo de los desalojos, debido a los períodos de suspensión de los mismos por parte del Supremo Tribunal Federal. Sin embargo, violando las recomendaciones nacionales e internacionales, el desplazamiento forzado de personas continuó siendo realizado por agentes públicos y privados, incluso ante un escenario de emergencia sanitaria.
El número de desalojos no fue aún mayor debido a articulaciones de movimientos sociales contra procesos de despojo, como la Campaña “Desalojo Cero”. Lanzada en julio de 2020, la iniciativa fue fundamental para que el Tribunal Supremo Federal concediera, al año siguiente, un instrumento legal (ADPF 828) que suspendía, de junio de 2021 a octubre de 2022, medidas administrativas o judiciales que dieran lugar a desalojos de carácter colectivo en inmuebles que sirvan de vivienda o que representen un área productiva para el trabajo individual o familiar de poblaciones vulnerables.
A lo largo de su vigencia, la ADPF 828 tuvo el efecto de suspender una serie de desalojos, pero también estuvo marcada por el incumplimiento por parte de de los gobiernos y del poder judicial de São Paulo.
Las últimas actualizaciones indican que, en este momento, el centro de São Paulo es el epicentro de los desalojos, que se producen en medio del “régimen de transición” establecido por la Corte Suprema, en octubre de 2022, ante el fin del suspensión de disposiciones. El panorama que se anuncia es el de la reanudación de los desalojos sin ningún apoyo a las familias afectadas.
* Énfasis en el número de casos abiertos en 2020, primer año de la pandemia de COVID-19, y confirmados o aprobados en 2021 –un total de 714 casos, el segundo mayor volumen de la serie histórica–, a pesar del estado de emergencia sanitaria y vigencia del ADPF 828.
Esta publicación fue realizada con el apoyo de la Fundación Rosa Luxemburgo (FRL) y fondos del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ). El contenido de la publicación es responsabilidad exclusiva de LabCidade y no necesariamente representa la posición de la FRL.
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